Vaya sorpresa me he llevado esta mañana en el hospital mientras una enfermera preparaba el catéter que me tenía que poner en un brazo (vía intravenosa). Me iban a hacer otra Resonancia Magnética Nuclear con contraste y le pregunté a la sanitaria sobre la sustancia que me iba a inocular. Me respondió que se trataba de Gadolinio y me ilustró sobre las propiedades y virtudes que ofrece a nivel de diagnóstico clínico.
Por entonces, yo no tenía ni idea de que este mineral también tenía una aplicación médica tan frecuente. He aquí la sorpresa: hace unos meses escribí unas palabras sobre el Gadolinio y su aplicación policial. La enfermera tuvo que soportarme mientras se lo exponía, porque no pude resistir la tentación de contárselo. Fue educada y no me dijo que cerrara el pico. Esto dije literalmente al respecto el pasado mes de diciembre en unos breves párrafos:
“El Gadolinio es un mineral que debidamente tratado aporta una gran ventaja a nivel legal, de cara a acreditar pruebas durante la investigación policial/judicial de disparos.
El Grupo Ruag, fabricante suizo de la munición SeCa (Securite Cartridge o Cartucho de Seguridad), tan utilizada en numerosos cuerpos de seguridad españoles, comercializa proyectiles impregnados de Gadolinio bajo la marca registrada Sintox Forensis.
Unos proyectiles policiales marcados con esta sustancia microscópica podrían dirimir, tras los pertinentes análisis efectuados por la Policía Científica, si las heridas de bala o impactos sobre objetos investigados fueron hechas con munición policial o no, en caso de no hallarse los proyectiles en el escenario, o en los cuerpos alcanzados. El Gadolinio, al parecer, siempre deja su impronta (trazas) y aunque sólo se detecte la presencia de una minúscula partícula, ésta será suficiente para acreditar lo antedicho.
Durante la investigación forense (legal), los métodos empleados en la localización del mineral pueden ser el microscopio electrónico de barrido (SEM) o el análisis de dispersión de energía de rayos X (EDX). También podría determinarse la distancia a la que se efectuó un disparo, en virtud de la cantidad de material hallado”.