Corey Knowlton, un cazador profesional texano, se ha convertido en uno de los pocos cazadores que ha tenido la suerte de abatir a un rinoceronte negro. Lo ha hecho en Namibia, país sudafricano donde la caza del black rhino, un animal en peligro de extinción, todavía está permitida bajo unos estrictos controles y un severa regulación (se conceden sólo 3 permisos al año).
Knowlton ha cumplido su sueño esta misma semana, tras un largo viaje a Namibia y después de varias jornadas pisteando a la especie elegida. En concreto, se trataba de un animal de avanzada edad que, según Ben Carter, director ejecutivo del Dallas Safari Club, mostraba un comportamiento que estaba siendo “perjudicial” para el resto de la manada de rinocerontes.
El cazador estadounidense consiguió el permiso para abatir a su primer rinoceronte negro a principios del pasado año, tras pujar en la subasta organizada por el Dallas Safari Club hasta la increíble cifra de 350.000 dólares, un dinero que según los organizadores de la expedición, el Ministerio de Medio Ambiente y Turismo de Namibia, se va a destinar a fines conservacionistas y a combatir contra los cazadores furtivos.
El gobierno de Namibia concede 3 permisos de caza anuales para el rinoceronte negro. Los conservacionistas del Ministerio son quienes deciden qué 3 animales pueden ser abatidos. Para ello, tienen que cumplir una serie de importantes requisitos, como que el animal ya sea anciano, que no esté en edad reproductiva, y que se le considere una amenaza para los rinocerontes más jóvenes y sanos. Y es que los rinocerontes son sumamente territoriales, por lo que frecuentemente se enfrentan en sangrientas batallas a vida o muerte.
Desde que hace 18 meses se hiciera público que Knowlton, de 36 años, había conseguido el permiso para cazar a un rinoceronte negro, el cazador se convirtió en el blanco de numerosas críticas, algunas de ellas llegando incluso a amenazarle de muerte. A pesar de todo, el cazador estadounidense se mantuvo firme y planificó durante todo este tiempo la cacería de su pieza más preciada, que esta semana finalmente se ha llevado a cabo.
Corey decidió invitar a un equipo profesional de la CNN para que grabara toda la expedición. En declaraciones a este mismo medio estadounidense, Knowlton explicaba los motivos de la grabación pública del safari: “A estas alturas, todo el mundo sabe de esta cacería y creo que es extremadamente importante que la gente sepa que se está haciendo de la forma correcta, de la forma más científica posible”. Para Knowlton, “La muerte de un macho más viejo, que ya no contribuye a la diversidad genética y que podría lastimar o matar a los machos más jóvenes, es parte de la ciencia de la conservación”, lo que apoya su teoría de que el gobierno de Namibia está haciendo un gran esfuerzo para salvar esta especie en peligro de extinción.
Como se puede ver en el vídeo grabado por la CNN, el cazador profesional Hentie van Heerden es quien ejerce de guía y quien dirige el rastreo en busca de la pieza seleccionada. Tras varios días siguiendo las huellas del rinoceronte negro, avanzando lentamente entre una densa maleza que supera en muchas ocasiones los 4 metros de altura y que apenas deja visibilidad, finalmente encuentran a su presa.
Knowlton llevó consigo un rifle Express del potente calibre .500 Nitro Express. Varios pildorazos de esta munición africana fueron los que tumbaron al rinoceronte negro, su pieza más preciada.
1 Comentariro
KRITO
Ser cazador es una profesión? Lo digo porque el articulo se refiere a esta escoria como cazador profesional.Que triste que exista este tipo de personas capaces de alimentar su ego y placer a osta de la vida de otros,si este señor es papá que espero no lo sea es muy denigrante el ejemplo que le da a sus hijos.Más triste aún que un gobierno se preste para este magnisidio.